EEUU: Su crisis está por llegar

Estados Unidos, ese monstruoso gigante económico por el que nunca pasan las crisis que creía poder mantener la senda del crecimiento vigoroso hasta el infinito y para el que las crisis habían desaparecido. Pero, ¿es realmente cómo nos lo venden?

Un tiempo atrás vengo observando una serie de circunstancias que me hacen pensar que el gigante americano tiene graves problemas y los quiere ocultar.

EEUU tiene un problema cada vez mayor de déficit de su balanza por cuenta corriente. La explicación a este déficit creciente se explica por dos motivos:

    1.  Las relaciones de China y EEUU. Antes de la burbuja subprime, Estados Unidos ya empezó a dar muestras de que su producción industrial empezaba a contraccionarse. La explicación fue que primero vino la crisis de las hipotecas basura y después la crisis de producción y de consumo, todo provocado por los famosos ninjas que expone Leopoldo Abadía en su gran libro.

Pero en mi opinión, no fue así. La entrada del gigante asiático en el panorama mundial y su célebre Yuan, provocó que EEUU dejara de exportar hacia Asía, debido a una pérdida de competitividad artificial de sus productos, ya que Pekín  controla la cotización de la moneda para mantenerla infravalorada, favoreciendo al sector exportador Chino y perjudicando las exportaciones americanas. Por contra, Estados Unidos comenzó a importar masivamente productos Chinos (ultracompetitivos), lastrando perniciosamente su balanza por cuenta corriente.

Cuando esta contracción se produjo, EEUU comenzó a producir menos y por tanto a incrementar un poco más sus índices de desempleo, lo que encendió la mecha de una bomba (crisis subprime), que con cualquier desajuste iba a explotar dejando un buen socavón.

      2.       Con Europa pasaba lo contrario. El Dólar era más competitivo que el Euro y el desvío de exportaciones al viejo continente se hizo efectivo. En Europa no estábamos inmersos en la problemática actual (más bien no la reconocíamos), del excesivo endeudamiento privado y posteriormente público.

Pero hace poco tiempo se empezaron a introducir las políticas de recortes globales en la Unión con la repercusión que esto tendrá en la balanza americana. Así que en EEUU dijeron: - Ostras que el lío ahora es doble. Cómo los europeos nos dejen de comprar, nos vamos a cagar patas arriba. Menudo problemón tenemos y además endeudados hasta las cejas.

A partir de ahí la maquinaria empieza a funcionar. Que si un famoso economista dice que Europa se arruina si no estimula su economía. Que si las agencias de rating (americanas y con políticos influyentes de este país), nos bajan la nota por no tener perspectivas de crecimiento al no estimular la economía. Que los periódicos económicos  americanos nos critican por no gastar, etc.

¿Coincidencias? Lo dudo. Intentan solucionar  un problema  llamando poco la atención.

Otro de los problemas del gigante es la política de la Reserva Federal. Esta tiene objetivos bien distintos al BCE, ya que su principal cometido es la estimulación económica. Cuando la crisis “puntocom” estalló en el año 2000, la RF bajó mucho sus tipos de interés para activar la economía.  La gente pedía crédito para gastar y así mover un sistema cuya gasolina es el dinero.

La contrapartida es que la inversión en EEUU se vio afectada. Si en un banco Y, te dan un 3% y la Caja H un 1,5%, ¿dónde llevarías tus ahorros? Pues eso ha sucedido entre EEUU y Europa, los tipos europeos han sido mayores que los de la RF, ganando dinero de inversionistas (comprando la famosa deuda pública, por ejemplo).

A todo ello debemos sumarle la desproporcionada deuda americana (14,3 billones de dólares) que debe refinanciar.  Pero esta política de pagar deuda con más deuda no es sostenible a lo largo del tiempo y más con el déficit en su balanza por cuenta corriente. Se puede decir que esta deuda es un tercio de la total mundial. Imaginad un default del gigante unido a la globalización económica.

La baja inflación, nos indica que su economía se enfría, la tasa de paro es peor que la mayoría de países de la Eurozona y existen entidades financieras que las creen saneadas, pese a no saber el volumen de activos financieros tóxicos que han vendido en todo el globo.

Ellos seguirán con sus políticas expansivas de pagar sus deudas con deudas pero, ¿hasta cuándo aguantará EEUU y su modelo de engordarse para morir?  Si bien no puedo dar una fecha, porque si lo hiciera mentiría, el obeso está más cerca del infarto de lo que siquiera imaginamos.